Hemos escuchado una infinidad de
veces que la masturbación es mala, pecado, cosa del diablo, que va hacer que no
crezcas, que el que se masturba está condenado a la enfermedad o peor aún nos dicen “no serás bienvenido en el reino de
Dios”.
Si los padres prestáramos menos
atención a
la exploración que hace en niño en sus primeras etapas del
desarrollo, la masturbación seria menos compulsiva, pues en mi experiencia
docente que es la prohibición la que fija el interés del niño.
Cuando se elimina el sentimiento de
culpa, el niño pierde el interés obsesivo por la masturbación y el morbo. La
moralidad actual y porque no de antaño,
represora, violenta, pareciera que prefiere hijos delincuentes que hijos
masturbadores; es pues, la represión de la masturbación la raíz de muchos
delitos, y ahora nos quieren imponer un sistema de prohibiciones, mayores a los
que ya tenemos, en el sistema educativo, lo llaman PIN PARENTAL, el cual
representa un atraso enorme en nuestro sistema educativo, además de fomentar de
manera radical la prohibición y la represión, es por ello que hoy hablo de la masturbación.
Para ser más claro pondré un ejemplo,
de lo que causa la represión de la masturbación y lo que puede causar este
sistema de prohibiciones que quieren imponernos:
En una ocasión platicando con un niño
que tenía una seria fascinación por el fuego, a tal grado de querer incendiar
su casa con una botella con gasolina, dentro de la plática lo primero que se me
ocurrió preguntar fue ¿por qué su fascinación por el fuego? ¿Qué representaba
para él?, su respuesta fue que el fuego representaba poder, muerte y destrucción,
me dijo algo así como el infierno. Mi segunda pregunta, ya bastante interesado
en ese peculiar interés del niño por el fuego, le pregunte ¿en cuál de estas
representaciones estaba pensando aquel día? Su respuesta fue el poder del infierno, lo que
me llevo a mi primera conclusión, la represión estaba muy presente en su educación
tanto en la casa como en la escuela, lo castigaban o regañaban diciéndole que
si hacia esto o aquello se iría al infierno.
Después ya entrado en terapia, le
pregunté ¿por qué una botella? Su respuesta me sorprendió, pero también se abrió
un panorama mayor, - la botella es algo largo con un agujero- respondió-
Después de algunas sesiones me pude
dar cuenta que sus costumbres de incendiario eran un sustituto de la
masturbación, pues se lo habían prohibido sus diferentes figuras de autoridad a
lo largo de su vida.
La masturbación es muy importante en
la educación y en el proceso de aprendizaje de los niños, pues la libertad de
los niños para masturbarse significa niños felices, alegres, fogosos y que en
realidad no tienen mucho interés en la masturbación, se interesa más en cosas
como las matemáticas, el arte, la danza, la historia, en cambio el niño
reprimido en su sexualidad, en este caso en su masturbación se interesa más por
la destrucción, son niños ansiosos, problemáticos y que odian.
Las prohibiciones traen consigo
infelicidad, odio, intolerancia, hoy más que nunca es muy importante que
entendamos esto, pues de esto trata el mentado pin parental, de prohibiciones,
y gran parte del odio, violencia y muerte que existe en el mundo nace precisamente
ahí en las prohibiciones sexuales de la infancia.